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EMPEZAMOS EL MÉTODO, CREANDO UNA RUTINA BÁSICA

Después de haber hablado del último lavado, toca hablar del Método Curly. Si ya tienes claro que quieres comenzar, vamos a crear una rutina básica.

Para ello, sólo necesitas 4 productos: algo para lavar, acondicionador, mascarilla y fijación. En cada lavado usaremos lo necesario para lavar, hidratar y definir. Recuerda que estos productos deben estar libres de sulfatos, siliconas, alcoholes secantes y/o ceras.

  • Lavar: anteriormente hablamos de las diferentes opciones que tenemos para lavar nuestro cabello, en este caso escogeremos entre un low poo o un cowash, dependiendo de nuestras preferencias y de las características de nuestro cabello. Eso sí, si te decides por cowash, escoge un producto específico para ello, ya que no todos los acondicionadores sirven para limpiar el cuero cabelludo y esto puede acarrearnos problemas como descamación, grasa, picores e incluso caída del cabello.

Lava con la frecuencia que lo necesites, no te guíes por la frecuencia de lavado de otras personas, cada cabello tiene sus necesidades.

  • Hidratar: acondicionador y mascarilla son los que nos ayudan a mantener nuestro cabello hidratado, en cada lavado debemos usar al menos acondicionador después del champú y al principio del método, al menos una vez a la semana una mascarilla (consejo: invertir en una buena mascarilla desde el primer momento es fundamental).

Tanto un producto como otro lo vamos a aplicar en medios y puntas, nunca en el cuero cabelludo ni en raíces para evitar problemas de acumulación y/o grasa.

El momento adecuado para desenredar nuestro cabello es al aplicar el acondicionador, lo haremos con los dedos o con un peine de púas anchas empezando por las puntas y subiendo hasta cerca de la raíz para evitar roturas. A continuación y con la cabeza hacia abajo, llenamos las manos de agua y apretamos varias veces el cabello hasta ir aclarando el acondicionador (puedes aclararlo por completo con agua si fuera necesario). Todos soñamos con que aparezcan la algas (mechones perfectos gorditos) en el primer lavado… pero lleva su tiempo, paciencia.

Una vez a la semana, pondremos mascarilla por un ratito (si me has hecho caso y has invertido en una buena mascarilla, unos 20 minutos será suficiente). Lo ideal es ponerla después del lavado, dejarla actuar y aclarar. Habrás leído que después de a mascarilla hay que poner acondicionador para sellar la hidratación… no es necesario. Si al aclarar la mascarilla, notas el cabello suave y sin enredos, incluso pudiendo hacer STC con ella, no es necesario ponerlo. Pero como esto no es una ciencia exacta, nuestro consejo es que pruebes a ver qué le va mejor a tu cabello, él es quien manda.

  • Definir: parece que este punto es el más importante o en el que la mayoría de las personas rizadas nos centramos, pero realmente lo más importante es mantener nuestro cabello hidratado, si es así, obtener una buena definición será pan comido. Existen muchísimos productos destinados a la definición, geles, espumas, cremas, activadores, etc. y puede resultar complicado qué escoger tendiendo a probar y probar hasta dar con nuestro producto estrella. Cada persona tiene sus preferencias, unas quieren un rizo muy marcado, otras buscan volumen, otras un resultado natural, por tanto no existe un producto que sea válido para todos. Lo mismo ocurre con las técnicas de definición, toca ir probando hasta encontrar la que mejor te va.

Además,  existen muchos más productos en el mercado que podrás ir usando, como  leave in, tratamientos de proteínas, aceites, voluminizadores, etc., pero ya tendremos tiempo y ocasión de hacerlo. Ahora además de los 4 productos que te hemos dicho, necesitas paciencia y constancia, no esperes resultados sorprendentes de un día para otro, esto es una carrera de fondo y merece la pena llegar a la meta.